sábado, 10 de septiembre de 2011

EL SEÑOR AYUDA A QUIENES...



Cierta vez, cuando William Swinton y yo éramos unos pobres aprendices de periodistas, atravesamos una grave crisis económica. Necesitábamos tres dólares aquel mismo día. Swinton repetía con sencilla confianza: "Dios proveerá". Yo vagaba por el vestíbulo de un hotel buscando algún medio de conseguir el dinero. Al poco tiempo se me acercó un hermoso perro y apoyó la cabeza en mi rodilla. Un general, que pasaba por allí, se detuvo a acariciarlo.
-Es una maravilla. ¿Lo vende?
Me sentí muy emocionado, era maravilloso cómo se había cumplido el vaticinio de Swinton.
-Sí - dije - Su precio son tres dólares.
El general se sorprendió.
-¿Sólo tres dólares? ¡cómo!. Yo no lo vendería ni por cien. Piénselo bien.
-No, tres dólares - repuse con firmeza.
El general se llevó al perro.
Al cabo de unos minutos llegó un hombre de aspecto triste que parecía buscar algo con ansiedad.
-¿Busca usted un perro? - le pregunté.
Se le iluminó el rostro. - Si.¿ lo ha visto?
-Sí. Me parece que sé donde está.
Pocas veces he visto a una persona tan agradecida. Le dije que esperaba que no le importaría pagarme tres dólares por la molestia.
-¡Válgame Dios! ¡Eso no es nada! ¡le pagaré diez dólares con mucho gusto!
-No, el precio son tres - repuse, y eché a andar.
Swinton había dicho que esa era la cantidad que proveería el Señor: Sería un sacrilegio pedir más.
Subí a la habitación del general y le expliqué que lo sentía mucho, pero que tenía que llevarme el perro otra vez, que se lo había vendido por equivocación. Le devolví sus tres dólares y entregué el perro a su dueño.
Después me marché con la conciencia tranquila, porque había actuado honradamente. Nunca podría haber hecho uso de los tres dólares que obtuve por la venta del perro, no me pertenecían legalmente. Pero los tres que me dieron por devolverlo eran míos en justicia. Puede que aquel hombre no hubiera recuperado nunca su perro si no hubiera sido por mí.
 
                             Mark twain.



MARK TWAIN: (Florida, Missouri 30 de noviembre de 1.835 - Redding, Connecticut 21 de abril de 1.910), fue un popular escritor y humorista estadounidense, su verdadero nombre era Samuel Langhorne Clemens, nació en una pequeña aldea de Florida donde sus padres habían emigrado cerca de un próspero tío suyo, a los cuatro años sus padres se trasladaron a Hannibal (Missouri)  puerto fluvial en el río mississippi y allí realizó sus primeros estudios, su padre murió cuando Twain tenía doce años, sin completar su educación, comenzó a trabajar como periodista en 1.862, se casó con Olivia Langdon. Algunas de sus obras son: Las aventuras de Tom Sawyer, príncipe y mendigo, las aventuras de Huckleberry Finn, un yanqui en la corte del rey Arturo, entre otras.

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RECORDANDO A LOS GRANDES DE LA MÚSICA.

Humilde homenaje a todos aquellos artista que en los años 60,70,80 y 90 nos emocionaron con sus canciones independientemente de si han faltado, ya no cantan o siguen activos en la música.

Hoy: FRANCO DE VITA (VENEZUELA).